lunes, 28 de enero de 2013

Athletic 3-0 At. Madrid (J21) - Esos días...

Vuelvo tras tener el chiringuito cerrado un tiempecillo por diversos motivos. Con esas vivencias telahínco o antenahez tendrían material de sobra para una miniserie de dos capítulos de esas que tanto les gustan. Me callo y no digo más, que aquí se viene a hablar de fútbol... Pero no sin antes felicitar a la Selección Española de Balonmano, que con un par de cojones reventó a la potente selección danesa para proclamarse bicampeona del mundo. Sigo mucho este deporte, sobre todo a nivel de naciones (JJOO, europeos y mundiales) y también veo cuando puedo al equipo de mi pueblo. El balonmano tiene un no sé qué que se yo que me atrae bastante, lástima que sea semidesconocido mediáticamente. Ojalá triunfos como este sirvan para promoverlo más, pero me temo que no...

Tras este inciso polideportivo, ¿qué decir del partido de este domingo? En mi opinión era, al igual que en Valencia, un escenario en el que se daban todos y cada uno de los ingredientes para perder: semis de copa a la vuelta de la esquina, rival en mejoría y necesitado, últimos resultados favorables ante ellos, posición acomodada en la tabla, falcaodependencia que no es tal pero que suena muy bien para rellenar crónicas... En resumen: uno de esos días en los que sabes que no deberías levantarte de la cama. Quizá por eso no me afectó mucho esta derrota ante el equipo que nos fundó. Justa, aunque probablemente excesiva. No vi los primeros treinta minutos, pero el Athletic demostraba ir a por el partido y sabía cómo crear peligro con el balón. Aún así Gorka Iraizoz hizo una parada de escándalo ante Raúl García tras dejada de DC (hecho que volvió a repetir en la segunda parte, la parada digo). Por cierto, Diego Costa, que hoy era necesario más que nunca, estuvo missing. Quizá tuvo algo que ver que el guiri de rojadirecta me lo llamara Diego Castro impunenmente durante todo el partido.

viernes, 18 de enero de 2013

At. Madrid 2-0 Real Betis (Copa) - A muerte a por ella

En primer lugar, no sé de donde saco las fuerzas para escribir esta crónica. Bueno, sí lo sé, de la confianza en mí mismo. Al igual que la tiene el Atleti, que tras una primera vuelta histórica, continúa una trayectoria inmaculada, sobre todo en casa. Ayer, cuando importaba más que nunca, no cedió ningún gol ante un buen Betis, al que derrotó con claridad por muy temprano que se levante su entrenador y los comentaristas antiatléticos de turno. Con el paso de los años me doy cuenta de que eso de "merecimos más" en un deporte en el que hacer gol es lo que cuenta es algo que cada vez comparto menos. El fútbol es tan simple como eso. Por supuesto de que hay caminos mejores que otros para llegar al objetivo, pero cuando las cosas no salen no veo sentido a lamentarse tanto, aunque lógicamente lo respetemos.

El partido siguió el perfecto guion que el Cholo escribió y los jugadores tan bien saben interpretar, por mucho que entren y salgan entre bastidores actores secundarios y la estrella de la película esté renqueante. Por tanto, salida en tromba del Atleti, que golpeó inmisericorde hasta lograr poner tierra de por medio. Tuvo que ver mucho en ello Don Diego Costa. DC intervino activamente en los dos tantos, en el primero por la zona derecha, proporcionando sitio para centrar a Raúl García, que puso un buen balón a un excelso desmarque hacia dentro de Falcao. En el segundo, se metió por la izquierda como el que no quiere la cosa pero sí la quiere y metió un centro de esos en los que es incluso más peligroso el rebote que el remate de un jugador amigo. Así fue, y Filipe anotó tras remachar el rechace (o rechazo como creo que se escribe realmente).
Luego los sevillanos se estiraron, pero más se estiró nuestro joven gran guardameta para negarles un gol que no sé si merecieron, pero que cuesta muy mucho meter en el Calderón. De ahí al final el Atleti contemporizó sin perder la intensidad. Basándome en los diez minutos que yo vi del final, el equipo tenía intrucciones de llegar arriba y no quedarse rezagado atrás, como se suele hacer en los partidos de liga. Eso o que aquí cualquier gol importa en este tipo de torneos. Por una cosa o por otra, entre la intensidad que ví de los nuestros y esa afición, que se oía igual de firme desde la sala de espera del hospital que en tv HD, me sentí orgulloso, como siempre, de conformar junto a los demás fieles una pequeña parte del escudo de nuestro Atleti. Un paso más hacia ganar la final...

lunes, 14 de enero de 2013

At. Madrid 2-0 Zaragoza (J19) - Amigo que nunca falla

Mi Atleti tiene la habilidad para regalarme victorias cuando peor estoy emocionalmente. Momentos como éste, éste, éste o ayer mismo, en los que mi equipo da la cara por mí para subirme los ánimos en situaciones límite.

Solo pude ver los primeros veinte minutos, pero ya me dio la sensación de que si el equipo seguía así, no habría problema alguno. El Real Zaragoza, con una extraña disposición y demasiado echado atrás, quedó totalmente cortocircuitado por los nuestros. Falcao, en una acción impropia de él, perdonó ante Roberto, que hizo una gran parada. Este portero no me importa que suene como futurible rojiblanco, es de la casa y podría volver en plan Gabi, para demostrar más de lo que hizo en su anterior etapa. Justo cuando perdí la última conexión informativa con mi equipo (la radio del móvil) llegó el gol de Tiago, que le ha quitado la titularidad a Mario, y que aprovechó su olfato goleador para anotar de córner en el primer palo. Poco después penalty claro sobre Arda Turan, y Falcao, ese samaritano del gol, esa divinidad del remate, ese tigre con corazón de león, marcó para no perder la costumbre. Algún día, cuando se vaya, a no ser que se vaya a la acera de enfrente o se comporte como Agüero, le dedicaré una poesía. Quizá haga esto que pierda a los pocos seguidores que tengo, pero yo escribo para desahogarme.

viernes, 11 de enero de 2013

Getafe 0-0 At. Madrid (Copa) - Con un ojo abierto

Por fortuna no ví el partido en el que el Atleti selló su pase a cuartos de final. A priori, podía parecer un trámite, pero había que portar un mínimo de profesionalidad y savoir faire para mantener la situación bajo control. Algo así como un par de policías locales controlando el tráfico de un pueblecito en hora punta, o un guardia de seguridad de un barrio pijo en el que nunca va a pasar nada grave, pero que tiene que estar allí y encima le pagan una pasta por ello. Un agnóstico (o más bien ateo) Getafe también contribuyó lo suyo a que este partido fuera un coñazo mayúsculo, dentro de los límites que para un seguidor del Glorioso puede significar ver un encuentro de los nuestros. Por lo que ví en el resumen y en las crónicas online, que con un intervalo de unos 20 minutos consultaba, todo fue una balsa de aceite, o más bien de cloroformo. La única pega es que por lo que percibo el Atleti debió haber ganado, pero francamente prefiero que se guarden los goles para la próxima batalla. Eso sí, en cuatro partidos de copa ni un gol encajado.

A destacar la presencia en el once de Cisa, Cata, Mario (¿ahora es titular o suplente?), Emre, y posterior participación de Manquillo, demasiado poco tiempo: apenas 10 minutos tuvo el chaval. Y respecto al candente tema de Óliver Torres siempre digo lo mismo, el Cholo sabrá lo que es lo mejor para el equipo. También volvieron Falcao y Arda, el primero sacó una roja a un rival que dejó el partido enterrado, si bien ya estaba muerto. En la segunda parte entró DC para sustituir al colombiano y dosificar recursos.

El jugador del Geta fue expulsado, más que por ocasión manifiesta por la aparatosidad de la entrada.

Como el que no quiere la cosa ya estamos en cuartos de final de Copa, un torneo que a mí me encanta, y al Atleti también: 9 campeonatos (y otros tantos subcampeonatos) nos contemplan. Nos enfrentaremos al Real Betis Balompié, que eliminó a Las Palmas. Si no recuerdo mal, la última vez que nos enfrentamos al Betis en Copa fue allá por el año 96, y recuerdo que hubo lío arbitral con una jugada en la que no expulsaron a Molina por tocar el balón con la mano fuera del área. (Efectivamente, confirmo que fue en ese año, en el que salimos campeones por última vez). Es una de mis pocas virtudes, la memoria para este tipo de gilipolleces como estadísticas deportivas. Para todo lo demás, infoatleti . Allí he descubierto posteriormente que el saldo general copero contra los de Heliópolis es de 1 a 6 para nosotros. Y eso siendo generosos, es decir, si contamos como triunfo bético una especie de sistema de liguilla de los años 20 en el que empatamos en casa y perdimos fuera. Aquí tienen la información detallada.

Por mucho que el Betis no sea un Madrid o un Barcelona, esta eliminatoria no me gusta un pelo. Habrá que ir con pies de plomo, y en esta ocasión con los dos ojos abiertos y el tercero bien cerrado. Hasta el lunes si Neptuno quiere...

lunes, 7 de enero de 2013

Mallorca 1-1 At. Madrid (J18) - La cara B

Comenzó el año (y no se lo voy a felicitar ni falta que les hace, no es mi estilo) rojiblanco con un grandísimo partido del Atleti. De los mejores que le he visto, por no decir el mejor, jugando fuera de casa esta temporada. Bien es cierto que el rival era de la zona baja, pero los equipos de Caparrós, nuestro cabrón [sic] de reyes personal este 6 de enero y el entrenador que peor me cae de Primera a muchas zancadas de Mourinho, tienen ese inconfundible toque suertudo, desquiciante y marrullero que cuanto más lejos mejor. Ahora saldrá el típico listo que si hipócrita, que si el Atlético no son monjitas, que si Diego Costa es un guarro, que si Simeone no es ningún santo, que pisó a Guerrero... Si es así, nadie le ha preguntado, lector respondón imaginario.


A pesar de las bajas, o precisamente espoleado por ello, el equipo jugó cómodo y bien durante el grueso del partido, disponiendo de muchas ocasiones y dominando con autoridad. Pero analizando la temporada del Atleti este año en liga, se han ganado muchos partidos sin ofrecer grandes dosis de fútbol, muchas por los pelos, por la mínima, sufriendo mucho... Era de ley que se diera un partido como el de hoy, en el que dominamos de principio a fin y no ganamos. Mejor que pase al empezar el año y que se den pocos disgustos como éste de aquí al final. Porque el Mallorca apenas la olió y en los últimos minutos, pudo incluso ponerse por delante. Y que conste que para mí no hubiera sido injusto, aunque sí doloroso. Así funciona este deporte... Aquí lo de mala suerte está más a la orden del día, y al haber menos ocasiones durante un encuentro que, por ejemplo, un partido de baloncesto o balonmano, mucha gente achaca a la diosa Fortuna todos los males y bienes. Pero en vez de culpar a la suerte yo prefiero hablar de talentos innatos, oportunismo, concentración, y aquello de "cuanto más se entrena más suerte se tiene". De pensar lo contrario, estaríamos tirándonos piedras sobre nuestro propio tejado, al menos en lo que respecta a esta temporada. En todo caso, siendo supersticiosos, la culpa de nuestra desgracia la tendría Dimonió, la mejor mascota de la liga con permiso del entrañable Indi.